Foto: Helena Lopes/Pexels

La titular de la Secretaría de Salud de la Ciudad de México, Olivia López Arellano, dio a conocer que las escuelas no cerrarán en caso de que se detecten contagios de COVID-19 durante el próximo regreso a clases presenciales, programado para el 30 de agosto.

“No es cerrar la escuela, no tenemos transmisión comunitaria, entonces, no es una lógica de cerrar la escuela, es la lógica de trabajar como se trabaja en los albergues, en los asilos, en todos los espacios que tiene, digamos, personas que conviven estrechamente”, señaló. 

En conferencia de prensa virtual, la funcionaria explicó que en caso de detectarse algún caso de COVID-19 en las escuelas, se hace un reporte epidemiológico y de inmediato se traslada a una brigada de la Jurisdicción Sanitaria, luego se realiza un cerco sanitario, el cual consistirá en la investigación de los contactos directos, la sintomatología sospechosa y el aislamiento inmediato.

Detalló que este cerco sanitario será el mismo que se utilizará en la vigilancia epidemiológica nacional de todas las enfermedades.

“Puede quedar muy general en el lineamiento pero es algo del día a día del trabajo sanitario de toda la Ciudad y de todas las entidades, es la investigación de los contactos directos que tienen la sintomatología sospechosa, del aislamiento inmediato, todo está previsto en los lineamientos”, informó.

Aseguró que todas estas pautas están previstas por la Autoridad Educativa Federal en la Ciudad de México (AEFCM), así como, la Secretaría de Salud y la Agencia de Protección Sanitaria.

“En principio estaremos pensando que vamos por una escuela con un retorno seguro, una escuela promotora de salud, donde justamente el programa de salud tendrá un papel muy importante en estos espacios y por lo tanto, estaremos haciendo un trabajo de prevención y promoción que nos permita estos espacios abiertos de manera segura”, agregó. 

Aunado a esto, López Arellano, indicó que por el momento no se contempla realizar pruebas aleatorias de COVID-19 a alumnos y maestros que participen en las clases presenciales, aunque “aún no se descarta la posibilidad”.

Recordó que maestros y alumnos, al igual que demás ciudadanos tienen acceso a las pruebas de COVID-19 que se realizan en los diversos quioscos, “como saben la Ciudad de México es la entidad que hace más pruebas, tenemos 3.4 millones de pruebas acumuladas y de estas la Secretaría de Salud ha realizado 3.2 millones de pruebas”. 

S.A.

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