**Título: Revelaciones falsas sobre supuestos videos sexuales de Clinton, Prince Andrew y Branson en los documentos de Epstein**
**Introducción**
Recientemente se han desvelado nuevos documentos relacionados con la operación de tráfico sexual dirigida por Jeffrey Epstein y su cómplice convicta Ghislaine Maxwell. En esta ocasión, los conservadores aprovecharon las acusaciones contra el ex presidente Bill Clinton. Sin embargo, la supuesta víctima de Epstein que hizo esas afirmaciones admitió en 2019 que las inventó. A pesar de esto, muchos medios de comunicación y teóricos de la conspiración de derecha difundieron titulares sensacionalistas sobre la existencia de videos sexuales de Clinton, Prince Andrew y Sir Richard Branson grabados por Epstein. En este artículo, analizaremos la información en contexto y desmentiremos las afirmaciones infundadas.
**Contexto de los documentos y las acusaciones**
Los archivos desvelados corresponden a un caso de difamación de 2015 presentado por Virginia Giuffre, quien alega ser una víctima de Epstein, contra Maxwell. Los “videos” a los que se hace referencia en los correos electrónicos provienen de otra supuesta víctima, Sarah Ransome. Los abogados de Alan Dershowitz, un asociado de Epstein, buscaban eliminar la “designación de confidencialidad” de los correos electrónicos para demostrar que el testimonio de Ransome era falso y que ella no era una testigo creíble. En los mensajes, Ransome afirmaba que la CIA había hackeado sus correos electrónicos y que había sido visitada por agentes especiales enviados directamente por Hillary Clinton, quienes amenazaban con filtrar fotos y videos comprometedores a WikiLeaks para perjudicar las campañas presidenciales de Clinton y Trump en 2016. Ransome afirmaba tener material de ese tipo en su posesión. Sin embargo, en una entrevista con la periodista Connie Bruck para un artículo de The New Yorker sobre Dershowitz en 2019, Ransome admitió que había inventado los videos para llamar la atención sobre el comportamiento de Epstein y hacerle creer que tenía “evidencia que saldría a la luz si me hacía daño”.
**La falta de veracidad de las acusaciones**
Es importante destacar que las afirmaciones de Ransome sobre los videos sexuales de Clinton, Prince Andrew y Branson fueron desmentidas por ella misma en 2019. A pesar de esto, los medios de comunicación de derecha y otros interesados en perjudicar a los demócratas siguen aferrándose a la posibilidad de que los documentos de Epstein puedan causar problemas a prominentes miembros del partido y alterar la carrera presidencial de 2024. Sin embargo, hasta el momento, los documentos no han revelado información impactante, ya que muchos de los detalles y nombres ya eran de conocimiento público debido a años de batallas legales. Aun así, los teóricos de la conspiración siempre pueden encontrar formas de interpretar la información a su favor.
**Conclusión**
En resumen, las afirmaciones sobre la existencia de videos sexuales de Clinton, Prince Andrew y Branson grabados por Epstein carecen de fundamentos. Estas acusaciones fueron desmentidas por la supuesta víctima que las hizo y se remontan a un caso de difamación de 2015. A pesar de esto, los conservadores y los teóricos de la conspiración continúan difundiendo estas afirmaciones infundadas con la esperanza de dañar la imagen de los demócratas. Es importante analizar la información en contexto y no dejarse llevar por las teorías sin fundamento.