Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, dejó en claro que su Gobierno no quiere entrar en polémicas con la Iglesia católica. En un comunicado, la Iglesia detalló que el peor escenario en el actual proceso electoral es aquel en el que el crimen organizado y grupos delincuenciales intervengan. El presidente López Obrador afirmó que México es un país libre y no se limitan los derechos de nadie, incluyendo el derecho a manifestarse de la Iglesia católica. Además, negó que haya riesgo de retroceso democrático por el clima de violencia en el país. El presidente descartó cualquier enfrentamiento con las iglesias y rechazó la estrategia de los publicistas del bloque opositor de buscar la confrontación. En este sentido, afirmó que su gobierno busca el amor y la paz. La Iglesia católica mexicana también señaló que se debe evitar a toda costa la intervención del crimen organizado y grupos delincuenciales en el proceso electoral, ya que la democracia electoral mezclada con la delincuencia es inaceptable. Por otro lado, la Iglesia pidió a las autoridades garantizar la seguridad en todos los rincones del país durante las elecciones del 2 de junio.
