El Gobierno de México ha anunciado que a partir del 20 de abril se requerirá visa para los ciudadanos peruanos que deseen ingresar al país. Esta medida tiene como objetivo reducir el número de peruanos que ingresan a México como turistas pero realizan actividades remuneradas. En respuesta, Perú ha impuesto el requisito de visa obligatoria para los ciudadanos mexicanos. Esta decisión ha generado tensiones en las relaciones bilaterales y ha afectado los compromisos asumidos en la Alianza del Pacífico para facilitar el libre movimiento de personas entre ambos países. Las relaciones diplomáticas entre México y Perú se mantienen a nivel de encargados de negocios debido a los desacuerdos entre los líderes de ambos países.
