La desaparición del obispo emérito Salvador Rangel Mendoza

El sábado pasado, el obispo emérito de la diócesis Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, desapareció al salir de su casa en Jiutepec, Morelos. La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) confirmó la noticia. Esta situación me hizo recordar el asesinato del cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo en 1993, cuando fue confundido por el cártel de los Arellano Félix con El Chapo Guzmán. Este crimen marcó la entrada de los cárteles de la droga en la vida pública y ocurrió poco antes de la visita del Papa Juan Pablo II a México.

El caso del obispo emérito

Afortunadamente, el obispo emérito Salvador Rangel Mendoza fue localizado con vida en un hospital de Cuernavaca. Los obispos solicitaron a sus captores que le proporcionaran medicinas debido a su delicado estado de salud. La CEM, a través del obispo Ramón Castro Castro, aseguró que se dará a conocer más información sobre su estado de salud y las circunstancias de su localización. El obispo había expresado previamente que estaba bajo amenazas y que los narcotraficantes estaban actuando con impunidad.

La tregua entre grupos criminales

No se puede ignorar el hecho de que el obispo emérito fue uno de los responsables de lograr una tregua entre los grupos criminales de Los Ardillos y Los Tlacos. Este es un acontecimiento relevante que merece una explicación detallada.

Retales

1. Fin del período legislativo sin avances en las reformas constitucionales anunciadas por López Obrador.

2. La llamada telefónica entre López Obrador y Joe Biden fue cautelosa y no se abordaron los temas polémicos del gobierno mexicano.

3. El fin de semana pasado fue el más violento del año, con un alto número de homicidios. Durante el gobierno de López Obrador, se ha alcanzado una cifra récord de homicidios.

Nos vemos mañana, pero en privado.

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