En los años 90, un dúo puertorriqueño llamado Baby Rasta & Gringo comenzó a abrirse camino en la escena musical, en una época en la que el reggaetón ni siquiera tenía ese nombre. Para ellos, hacer música era como un deporte, una pasión que los llevó a experimentar con sonidos que combinaban el rap y el reggae. A pesar de los obstáculos y rechazos iniciales, lograron romper barreras y hacer que el reggaetón se convirtiera en un fenómeno cultural a nivel internacional.
El camino hacia el éxito del reggaetón
Para Baby Rasta & Gringo, el reggaetón es más que un género musical, es un reflejo de su identidad y lucha por ser aceptados en la industria. A pesar de las dificultades iniciales para que sus letras fueran entendidas y difundidas en los medios, nunca renunciaron a su estilo auténtico y callejero. Hoy en día, ven con orgullo cómo el reggaetón ha trascendido fronteras y se ha convertido en un fenómeno global, gracias al esfuerzo de muchos artistas dedicados a mantener viva esta música.
La piratería como aliada en el pasado
Baby Rasta & Gringo recuerdan con nostalgia la época en la que la piratería era su principal forma de promoción. A pesar de no recibir beneficios económicos por la difusión ilegal de su música, supieron adaptarse a las circunstancias y aprovechar la oportunidad para darse a conocer en nuevos mercados. A través de la piratería, lograron conquistar escenarios internacionales y consolidar su carrera como pioneros del reggaetón.
Consejos para los artistas del futuro
Baby Rasta & Gringo aconsejan a las nuevas generaciones de artistas que se preparen para enfrentar los desafíos del mundo digital y la autogestión. En un contexto en el que la tecnología permite a cualquiera producir y difundir su música, es fundamental tener paciencia y dedicación para destacar en la industria. A través de su experiencia, invitan a los artistas emergentes a ser perseverantes y creativos en su camino hacia el éxito.

