La Doble Moral del Tlatoani No. 22

El Instituto Nacional Electoral (INE) cumplió con su deber, no social pero si legal, y el pasado viernes aprobó, bajo el principio de representación proporcional, la asignación de diputados federales. Tras seis horas de angustia y discusión, los consejeros anunciaron el sueño dictatorial del Tlatoani que vive el palacio: Morena y sus aliados tendrán el 73% de curules en San Lázaro, es decir, carta abierta para modificar la Constitución.

Un cheque en blanco a conveniencia de quien se siente en la silla presidencial. Con la mayoría calificada, el presidente puede hacer del país su circo personal y decidir a beneficio la cartelera del espectáculo. Si el Poder Judicial le estorba, el dueño puede suspenderlo y si el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) le exhibe sus negocios ilegales, el patrón (o patrona) lo puede despedir.

Se debe dejar en claro que, a partir de hoy, el Tlatoani en turno podrá transformar o erradicar instituciones a conveniencia, él ahora es el dueño del balón, de la cancha y de los jugadores. No se había visto concentración del poder más abusiva, descarada y cínica desde que Disney compró a 20th Century Fox, por ende, las preguntas surgen: ¿Cuáles serán los parámetros y límites de las modificaciones?, ¿Quién frenará las locuras del emperador?, pero más importante aún; si le das más poder al poder ¿Más duro te van a venir a coger?.

Que triste fue decirles adiós a los organismos autónomos, cuando los necesitábamos más. “Al diablo con sus instituciones“, gritaba un joven Andrés Manuel que, como golondrina emigró, presagiando el final. Que triste luce todo sin INE, la democracia se va, se tiñen los colores de guinda, hoy todo es 4T. (Léase con la voz del Príncipe de la Canción).

Hoy quiero saborear mi dolor

¿Para qué un presidente (o presidenta) querría modificar la constitución? A diferencia del agua que hoy inunda Chalco, la respuesta si es clara; las modificaciones futuras no serán a beneficio del “pueblo bueno“, reformar la constitución, así como a los dos poderes que acompañan al ejecutivo, tiene el único objetivo de beneficiar al poder, llámese gobernantes, mandatarios, políticos a fines del oficialismo o cualquier institución ilegal que rime con arco, mismas que entablan diálogo con el gobernador de Sinaloa.

Por otra parte, desaparecer organismos autónomos que le exigen cuentas a presidencia, es una jugada tan chueca como la cara de cierta gobernadora de Campeche. Por ejemplo, sin INAI, ¿Quién nos informará en qué se gasta el presupuesto público? y sin COFECE ¿Quién combatirá los monopolios?.

¿Debemos confiar en que la misma administración gubernamental rendirá cuentas ante los mexicanos?, ¿Durante estos 6, 12 o 18 años lo han hecho?, ¿Se debe creer ciegamente en la palabra de un gobernante?, la historia nos ha enseñado que lo único más negro, dudoso, dañino y cuestionable que el agua de Chalco, es la palabra de un político.

El gobierno vela por sus propios intereses, sin instituciones independientes que monitoreen su administración, ¿Quién garantiza que el gobierno no le mienta, no robe y no traicione al pueblo de México?, ¿Quién vigilará a Claudia Sheinbaum?.

No sé si vuelva a verte después

López Obrador prometió transformación y transformación entregó; a base de mentiras, desinformación y lucrando con el desconocimiento de sus votantes. Andrés se aprovechó de las necesidades sociales, del hartazgo y cansancio político para lucrar con la esperanza. Se retira y deja el camino preparado para que Claudia disponga de un poder absoluto.

La presidenta recibe un país en donde, un prófugo de la justicia, Javier Corral, podrá ser senador y no rendir cuentas solo porque es protegido de Morena, un país en donde el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, tiene presuntos vínculos con el narcotráfico, pero no será investigado porque se alineó con el oficialismo, recibe un país con un gobierno incongruente, al servicio de sus amistades y no de los mexicanos.

Sheinbaum gobernará un México sin instituciones que le exijan cumplir la ley, la nueva dueña del circo, ¿Despedirá a los empleados que no se alineen con sus caprichos?, ¿Mantendrá el nepotismo e influyentismo?, su gabinete, su protección a Delfina Gómez y su nula empatía por las victimas nos presagian un infernal sexenio.

Share.
Exit mobile version