El 3 de diciembre de 1976, un cerdo gigante inflable llamado ‘Algie’ se convirtió en el protagonista inesperado de los cielos londinenses. Liberado de sus amarras, este peculiar inflable de 12 metros de largo no solo sorprendió a los ciudadanos, sino que también causó un gran revuelo al volar sin rumbo, convirtiéndose en un peligro para la aviación. El cerdo había sido diseñado para ser la portada del décimo álbum de Pink Floyd, titulado ‘Animals’, pero su aventura se tornó caótica cuando se dirigió hacia el aeropuerto de Heathrow.
Una aventura descontrolada en el aire
El cerdo inflable, hecho de plástico y helio, comenzó su vuelo en un día invernal que rápidamente se volvió memorable. Al cruzarse con la trayectoria de los vuelos en Heathrow, las Autoridades de Aviación Civil emitieron una alerta a todos los pilotos, quienes debían estar atentos al extraño “cerdito volador”. La situación se tornó crítica, obligando a varios vuelos a regresar y generando la intervención de helicópteros de la policía y la Real Fuerza Aérea para intentar recuperar el inflable. Finalmente, Algie aterrizó en un establo en Godmersham, donde asustó a las vacas del granjero local.
La historia detrás de Algie
Pink Floyd tenía planes específicos para ‘Algie’, quien debía volar sobre la Central Eléctrica de Battersea durante tres días para una sesión de fotos. Sin embargo, el primer día las condiciones climáticas no lo permitieron, y el segundo día, una ráfaga de viento lo liberó de sus cuerdas. El diseñador Aubrey Powell recordó que recibió una llamada de un granjero que informaba sobre el cerdo volador causando estragos en su granja. A pesar de la confusión, el inflable fue recuperado y reparado para continuar con la sesión de fotos, esta vez con medidas de seguridad más estrictas.
Un símbolo perdurable de Pink Floyd
La imagen de ‘Algie’ se convirtió en un ícono no solo por su peculiaridad, sino también por su conexión con la banda. La idea de utilizar el cerdo inflable surgió del bajista Roger Waters, quien veía en la Central Eléctrica de Battersea una representación arquitectónica significativa. A pesar de los contratiempos, la portada de ‘Animals’ fue finalmente creada, combinando imágenes de diferentes días. Desde entonces, los cerdos inflables han sido parte de la escenografía de Pink Floyd, consolidando a Algie como un símbolo perdurable de la banda y su legado en la música.