La sesión del Senado de la República vivió un momento de alta tensión la noche del 5 de diciembre, cuando los senadores Adán Augusto López de Morena y Enrique Vargas del PAN estuvieron a punto de enfrentarse físicamente. La discusión, que comenzó en un tono acalorado, se intensificó rápidamente, llevando a los legisladores a un punto de ebullición.

Incidente violento en el Senado

El conflicto se desató cuando Enrique Vargas se acercó a Adán Augusto, lo que provocó que el morenista reaccionara y se dirigiera hacia él, aunque fue contenido por otros senadores. Manuel Velasco, del Partido Verde, jugó un papel crucial al detener a Vargas, mientras otros colegas intentaban calmar la situación. Luis Fernando Salazar, también de Morena, mostró su enojo al intentar jalar a Vargas por la espalda, pero también fue rápidamente controlado por Velasco.

Reacciones de los senadores

En medio del tumulto, Vargas expresó su preocupación por el ambiente de violencia y agresiones que, según él, está marcando las actitudes del grupo mayoritario de Morena. Por su parte, Adán Augusto López defendió su postura, afirmando que la hombría no se demuestra desde un sillón en el Senado, sino a través de la responsabilidad en los actos. La presencia de Ricardo Anaya y otros senadores del PAN en el incidente añadió un elemento más a la ya tensa atmósfera de la Cámara Alta.

Causas del conflicto

La disputa se originó por comentarios relacionados con Miguel Ángel Yunes Márquez, un senador expulsado del PAN. Mario Vázquez, del PAN, acusó a Morena de cinismo al presentar a Javier Corral como un senador independiente tras una reciente controversia. La situación escaló cuando Yunes, enojado por los comentarios de Vázquez, se acercó a confrontarlo, lo que llevó a la intervención de Vargas y al posterior descontrol. Gerardo Fernández Noroña, presidente del Senado, tuvo que intervenir y declarar un receso para intentar restaurar el orden.

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