Lilly Téllez, senadora del PAN, ha acaparado la atención esta semana tras sus contundentes declaraciones en el Senado, donde no ha dudado en criticar a la administración de la 4T. Sus intervenciones han generado un ambiente de tensión, especialmente al señalar a figuras clave como Adán Augusto López y Claudia Sheinbaum, lo que ha llevado a que su voz se convierta en un referente de la oposición en México.

Polémicas en el Senado: La semana de Lilly Téllez

A lo largo de la semana, Téllez ha abordado temas de gran relevancia nacional que han encendido los ánimos en el Senado. Su oposición a la reforma que incluye la palabra “Presidenta” en la Constitución fue un punto álgido, ya que fue la única senadora que se opuso a esta modificación, argumentando que no cedería a lo que considera un capricho de la presidenta Sheinbaum.

Desafíos sobre la inclusión de la palabra ‘Presidenta’

La senadora Téllez argumentó que la inclusión de la “A” en “Presidenta” era innecesaria, lo que llevó a una respuesta de Sheinbaum, quien defendió la importancia de la inclusión femenina en el lenguaje. Este intercambio dejó claro el choque ideológico entre ambos bandos, evidenciando la polarización en el Senado.

Cuestionamientos sobre la corrupción en la 4T

Otro momento destacado fue cuando Téllez cuestionó a Adán Augusto López sobre la gestión de recursos en el Senado, lo que provocó un acalorado debate. En medio de acusaciones de irregularidades en contratos por 150 millones de pesos, Téllez no dudó en exigir transparencia, lo que desencadenó una serie de gritos y enfrentamientos verbales con otros senadores, incluyendo a Gerardo Fernández Noroña.

Acusaciones de corrupción contra Rutilio Escandón

La senadora también arremetió contra Rutilio Escandón, exgobernador de Chiapas, a quien calificó de corrupto tras su nombramiento como cónsul en Miami por parte de Sheinbaum. Téllez afirmó que Escandón debería estar en prisión por su supuesta colusión con cárteles, lo que provocó risas y comentarios de los senadores de Morena, intensificando el clima de confrontación en la Cámara Alta.

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