La Tarjeta de Movilidad Integrada se ha consolidado como el medio principal para desplazarse por la Ciudad de México, tanto en el Metrobús como en el Metro. Esta tarjeta está reemplazando gradualmente a los tradicionales boletos magnéticos que por años fueron utilizados para acceder al transporte público de la capital. Sin embargo, al ser un sistema digital, presenta algunos fallos, especialmente al momento de recargar saldo.