Michael Jackson, conocido como el Rey del Pop, ha dejado una huella imborrable en la música mundial. Su carrera, marcada por ventas millonarias y giras espectaculares, abarca más que solo el pop; comenzó su andadura musical a finales de los años sesenta como un talentoso cantante infantil de soul con The Jackson 5. Sin embargo, a pesar de su éxito temprano, la trayectoria de Jackson también incluyó fracasos, siendo Forever, Michael su único álbum que no logró resonar con el público en su lanzamiento hace cincuenta años.
El lanzamiento de “Forever, Michael”
El 16 de enero de 1975, Michael Jackson lanzó Forever, Michael, un álbum que no logró posicionarse entre los cien discos más vendidos en Estados Unidos, quedándose en la posición 101. Este hecho resulta sorprendente, considerando que el álbum contiene material de alta calidad, aunque su recepción fue fría en el momento de su lanzamiento. A pesar de ser un buen disco, no logró captar la atención que merecía, lo que llevó a su paso casi inadvertido por el mercado musical.
La producción y el contenido del álbum
Forever, Michael fue el último trabajo de Jackson con Motown, y aunque la compañía había reconocido su talento, parece que no pusieron suficiente esfuerzo en la promoción de este disco. A pesar de contar con composiciones de renombrados autores de Detroit, como los hermanos Holland y Hal Davis, el álbum no logró conectar con el público. Canciones como One Day in Your Life, una balada conmovedora, y We’re Almost There, con arreglos orquestales, no alcanzaron el éxito esperado en una época donde predominaban otros estilos musicales.
El impacto de “Forever, Michael” en la carrera de Jackson
A pesar de que Forever, Michael solo vendió alrededor de cien mil copias en Estados Unidos, su lanzamiento marcó un punto de inflexión en la carrera de Michael Jackson. Después de este álbum, Epic Records lo fichó y le ofreció la oportunidad de trabajar con el aclamado productor Quincy Jones en su próximo proyecto, Off the Wall. Este álbum, lanzado cuatro años después, se convertiría en un gran éxito y daría paso a la era dorada de Jackson, culminando con el legendario Thriller en 1982, que lo consagró como el verdadero Rey del Pop.