En una inusual aventura en Cornualles, Inglaterra, Noel Gallagher, guitarrista de Oasis, se encontró en el centro de una controversia legal mientras la banda trabajaba en su sexto álbum. El 2 de febrero de 2004, durante un paseo que pretendía ser relajante, Gallagher decidió caminar por las vías del tren, una acción que resultó en problemas con la ley. Un paparazzi de The Sun capturó el momento y, como consecuencia, la policía británica inició una investigación sobre su transgresión.

Un paseo peligroso y las repercusiones

La imagen de Gallagher, con la cabeza gacha y las manos en los bolsillos, fue publicada en el tabloide británico, lo que llevó a la Policía de Transporte a buscarlo para un interrogatorio. El inspector Kevin Marshall comunicó que la infracción era potencialmente peligrosa y un mal ejemplo, especialmente para los jóvenes que podrían intentar imitar su comportamiento. A pesar de que el historial de Noel era menos problemático que el de su hermano Liam, esta situación lo sorprendió al convertirse en un ‘forajido’ por simplemente dar un paseo.

El entorno de grabación en Sawmills Studios

Oasis eligió los Sawmills Studios, un lugar tranquilo y apartado a orillas del río Fowey, para grabar su esperado álbum. Este entorno idílico era perfecto para los hermanos Gallagher, quienes buscaban escapar del acoso mediático al que estaban acostumbrados. Sin embargo, el proceso de grabación, que comenzó a finales de enero de 2004, se vio afectado por la reciente salida del baterista Alan White y la llegada de Zak Starkey, hijo de Ringo Starr, como nuevo miembro de la banda.

Un álbum que tardó en llegar

A pesar de las expectativas, las primeras sesiones de grabación no resultaron como se esperaba. Noel Gallagher reconoció que el material producido durante esas tres semanas no cumplía con sus estándares. Finalmente, el álbum titulado ‘Don’t Believe the Truth’ se lanzó el 30 de mayo de 2005, más de un año después de aquellos eventos en Cornualles. La experiencia dejó una huella en la banda, recordándoles que incluso en los momentos de creatividad, la vida puede ofrecer sorpresas inesperadas.

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