La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) realizó un estudio en el que analizó 57 marcas de atún y encontró que 18 de ellas contenían soya sin declararlo en la etiqueta. Este hallazgo ha generado preocupación entre los consumidores que buscan productos de calidad y transparencia en su etiquetado.

Opciones de atún sin soya y con alto contenido proteico

El análisis de Profeco destaca que existen marcas que cumplen con las expectativas de los consumidores al ofrecer atún sin soya, rico en proteínas y a precios accesibles. Por ejemplo, el atún en agua de la marca Mazatún se posiciona como una de las mejores opciones, presentando un 0% de soya y un 22% de proteína, a un precio aproximado de 18 pesos. Otra alternativa recomendada es el atún en trozos de la marca Great Value, que también está libre de soya y contiene un 19% de proteína, con un costo de alrededor de 15 pesos.

Marcas adicionales recomendadas por Profeco

Además de Mazatún y Great Value, Profeco ha identificado otras marcas que ofrecen atún sin soya:

  • Tuny Clásico en trozo en agua: Sin soya, 22% de proteína, precio aproximado de 19 pesos.
  • Dolores Premium en aceite de oliva: Sin soya, 22.8% de proteína, precio aproximado de 21 pesos.
  • Tuny Gourmet en aceite de oliva: Sin soya, 23% de proteína, precio aproximado de 23 pesos.

Estas opciones garantizan calidad y un alto contenido proteico, además de evitar ingredientes no declarados que podrían afectar la salud de los consumidores.

La importancia de leer las etiquetas del atún

Para asegurarte de que el atún que compras no contiene soya, es fundamental leer las etiquetas de los productos. Busca que indiquen “100% atún” o “sin soya” y verifica la lista de ingredientes. Es recomendable evitar aquellos que mencionen “proteína vegetal” o “soya”. Además, puedes consultar los estudios de Profeco en la Revista del Consumidor, donde se publican análisis de productos y se identifican las marcas que cumplen con las normativas.

¿Por qué algunas marcas agregan soya al atún?

La soya es un ingrediente más barato que el atún, lo que lleva a algunas marcas a utilizarla para reducir costos y aumentar el volumen del producto. Sin embargo, esta práctica puede resultar engañosa para el consumidor, especialmente si no se declara en la etiqueta. Además, es importante considerar que algunas personas pueden ser alérgicas a la soya o preferir evitarla en su dieta, lo que hace crucial que las marcas informen correctamente sobre los ingredientes de sus productos.

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