Tomás Yarrington enfrenta nuevas acusaciones de corrupción
La Fiscalía General de la República (FGR) ha emitido un segundo auto de formal prisión contra Tomás Yarrington, exgobernador de Tamaulipas, por operar con recursos de procedencia ilícita. Este anuncio, realizado el 25 de mayo, se suma a las acusaciones previas que enfrenta Yarrington, quien ya se encuentra recluido en el Penal del Altiplano desde su deportación desde Estados Unidos el 9 de abril.
Nuevas acusaciones y vínculos criminales
El nuevo auto de formal prisión detalla que Yarrington está vinculado a operaciones con dinero de origen ilícito y se sospecha que forma parte de una organización criminal que recibió recursos de una banda delictiva. Se le acusa de haber adquirido tres inmuebles tanto en México como en el extranjero utilizando estos fondos. Las investigaciones apuntan a que el Cártel del Golfo podría estar detrás de las actividades ilegales en las que se le involucra.
Delitos adicionales y posibles sanciones
Además de los cargos por operaciones con recursos de procedencia ilícita, Yarrington enfrenta acusaciones por delitos contra la salud, específicamente en modalidad de colaboración. Se le señala por facilitar la ejecución de delitos relacionados con el narcotráfico, lo que podría conllevar a penas más severas en su proceso judicial. La FGR está preparando su estrategia para presentar pruebas contundentes en su contra, considerando su historial delictivo.
Un recorrido por la caída de Yarrington
Tomás Yarrington, quien fue gobernador de Tamaulipas de 1999 a 2004, ha visto su carrera política desmoronarse desde que comenzaron las acusaciones de lavado de dinero en 2011. Tras ser detenido en Italia en 2017 y extraditado a Estados Unidos, donde cumplió una condena de nueve años, Yarrington confesó haber recibido sobornos que superan los 3.5 millones de dólares. Su caso resalta la compleja relación entre la política y el crimen organizado en México.