El Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) se ha posicionado como una de las organizaciones criminales más influyentes en México, extendiendo su alcance a más de 40 países, según un informe reciente de la Administración de Control de Drogas (DEA). Esta organización no solo es un importante proveedor de fentanilo ilícito a Estados Unidos, sino que también ha logrado establecer operaciones en varios estados de la República Mexicana, aumentando su presencia y actividad delictiva.
Operaciones y expansión del CJNG
La DEA destaca que el CJNG ha expandido sus tentáculos a lo largo del territorio mexicano, con operaciones en estados clave como Baja California, Jalisco, Veracruz y Tamaulipas, entre otros. Esta expansión ha sido facilitada por su capacidad para corromper a funcionarios y su acceso a vastos recursos financieros, lo que les permite mantener y aumentar su influencia en el tráfico de drogas.
Sanciones y acciones del Departamento del Tesoro de EE. UU.
En un movimiento significativo, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos impuso sanciones a cinco altos mandos del CJNG, incluyendo a su líder, Nemesio Rubén Oseguera Cervantes, conocido como ‘El Mencho’. Estas sanciones se deben a su participación en el tráfico de fentanilo y otros actos de violencia. El secretario del Tesoro, Scott Bessent, enfatizó el impacto devastador de las actividades del CJNG en la sociedad, afirmando que su reinado de terror ha destruido innumerables vidas inocentes.
Actividades económicas del CJNG
La principal actividad del CJNG, según la DEA, es la fabricación y distribución de drogas ilícitas como el fentanilo y las metanfetaminas. Sin embargo, también están diversificando sus fuentes de ingresos al involucrarse en actividades como el robo de gasolina, extorsiones y fraudes inmobiliarios. Esta diversificación busca proteger sus activos del tráfico de drogas ante posibles decomisos por parte de las autoridades, asegurando así su sostenibilidad en el crimen organizado.