El Congreso de México ha aprobado un conjunto de reformas a la Ley General de Población y la Ley General en materia de Desaparición Forzada, que transforman la Clave Única de Registro de Población (CURP) en una CURP biométrica. Este cambio es parte de un nuevo sistema de identificación digital que busca mejorar la búsqueda y localización de personas desaparecidas en el país, un tema crítico dado el aumento de desapariciones forzadas en México.
Creación de la Plataforma Única de Identidad
Las reformas incluyen la creación de una Plataforma Única de Identidad, que estará conectada a bases de datos relevantes como el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y el Banco Nacional de Datos Forenses. Según el Gobierno Federal, esta plataforma tiene como objetivo facilitar las investigaciones y mejorar la identificación de personas desaparecidas, un problema que ha afectado a miles de familias en México.
Incorporación de Datos Biométricos
Uno de los aspectos más controversiales de la CURP biométrica es la inclusión de datos biométricos, como huellas digitales, fotografías y firmas digitales. Este documento no solo será obligatorio para realizar trámites, sino que las autoridades tendrán acceso a esta información en tiempo real. Esta medida ha generado preocupación entre grupos de búsqueda de personas, quienes advierten sobre posibles violaciones a la privacidad y el riesgo de espionaje.
Detalles de la Implementación y Registro Biométrico
La nueva CURP integrará datos personales y biométricos, como el escaneo de huellas digitales y del iris, para garantizar la seguridad de la identidad. Los datos serán almacenados en el Registro Nacional de Población (RENAPO) y estarán vinculados a un código QR en la CURP biométrica. Aunque no se ha establecido una fecha exacta para su implementación, se espera que comience a aplicarse en el segundo semestre de 2025, tras un periodo transitorio de hasta 90 días después de su publicación oficial.