Expulsión de Hernán Bermúdez Requena de Morena
Luisa María Alcalde, la lideresa nacional de Morena, anunció la expulsión de Hernán Bermúdez Requena del partido, una decisión que se tomó tras la revelación de una orden de aprehensión en su contra. Bermúdez, quien fue secretario de Seguridad en Tabasco durante el gobierno de Adán Augusto López, ha sido señalado por presuntos vínculos con el crimen organizado, específicamente como líder de un grupo conocido como ‘La Barredora’. La expulsión, que se formalizó después de varios meses de deliberaciones, se justifica por “obvias razones”, según Alcalde.
Proceso de expulsión y antecedentes
La Comisión Nacional de Honestidad y Justicia de Morena tiene la facultad de suspender derechos y, en casos graves, expulsar a sus miembros. Alcalde explicó que la decisión de expulsar a Bermúdez se tomó después de que se confirmara su situación legal. Aunque inicialmente se había decidido suspender sus derechos partidistas al inicio de la investigación, la expulsión se concretó tras la falta de respuesta del exfuncionario a las acusaciones en su contra. Este proceso ha tardado más de seis meses, tiempo en el cual la lideresa había indicado que no se tomarían acciones hasta contar con una sentencia.
Reacciones y declaraciones del partido
Jesús Selván García, dirigente estatal de Morena, había negado previamente cualquier relación de Bermúdez con el partido, asegurando que no estaba afiliado. Selván acusó a opositores políticos de intentar vincular a Bermúdez con Morena como parte de una campaña de desprestigio. A pesar de las afirmaciones de la dirigencia estatal, la expulsión de Bermúdez marca un punto significativo en la lucha interna del partido contra la corrupción y el crimen organizado.
Situación legal de Hernán Bermúdez
En cuanto a su situación legal, el fiscal general Alejandro Gertz Manero informó que Bermúdez se ha negado a declarar en las audiencias relacionadas con su caso. Además, se ha revelado que un juez le otorgó una suspensión definitiva contra la orden de aprehensión por delincuencia organizada, lo que complica aún más su situación. Este desarrollo pone de manifiesto la tensión entre la justicia y la política en México, mientras el partido busca distanciarse de cualquier asociación con actividades delictivas.