El consumo de cerveza es una práctica social y culturalmente arraigada en México. Sin embargo, más allá de su contenido alcohólico y calórico, existe otro componente que a menudo pasa desapercibido para el consumidor promedio: el azúcar.
El azúcar oculto en tu cerveza
Una investigación exhaustiva llevada a cabo por la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) ha puesto al descubierto niveles significativos de azúcar añadida en cinco marcas de cerveza de gran distribución en el país. Este hallazgo ha generado sorpresa y alarma, especialmente entre quienes buscan opciones de bebidas con menor contenido de azúcares.

Marcas bajo la lupa de Profeco
La presencia de azúcares en la cerveza no es inherente al proceso de fermentación, donde los azúcares de la malta se convierten en alcohol y dióxido de carbono. El azúcar adicional puede ser incorporado durante la producción para modificar el sabor, el cuerpo o la sensación en boca de la bebida. Si bien la Profeco no ha especificado las cantidades exactas de azúcar encontradas en cada una de las cinco marcas señaladas en el artículo, la advertencia sobre su “mucho azúcar” es un indicativo de que los niveles superan lo que se consideraría bajo o despreciable.
Implicaciones para la salud y recomendaciones
No obstante, un consumo elevado de azúcares, incluso en bebidas alcohólicas, puede contribuir al aumento de peso, al desarrollo de enfermedades metabólicas como la diabetes tipo 2 y a otros problemas de salud. Por ello, la transparencia en el contenido nutricional de las bebidas alcohólicas se vuelve crucial para que los consumidores puedan tomar decisiones informadas. La investigación de la Profeco subraya la importancia de estar informados sobre la composición de los productos que consumimos, incluso aquellos que no percibimos como inherentemente “dulces”.
En conclusión, la revelación de la Profeco sobre el alto contenido de azúcar en cinco marcas populares de cerveza en México es un llamado de atención para los consumidores. Esta información subraya la necesidad de una mayor transparencia en el etiquetado de las bebidas alcohólicas y fomenta la toma de decisiones más conscientes en relación con la salud. Moderar el consumo de estas cervezas y optar por alternativas con menor contenido de azúcar puede ser una estrategia prudente para aquellos preocupados por su ingesta de azúcares y sus posibles efectos en la salud a largo plazo.