En las últimas semanas, la marca de suero oral Electrolit se ha encontrado en el centro de una controversia en redes sociales: ¿contiene demasiado azúcar y es perjudicial para la salud? Para disipar los rumores y ofrecer una perspectiva clara a los consumidores, tomamos en cuenta el estudio que la Procuraduría Federal del Consumidor realizó a los sueros orales, bebidas para deportistas y bebidas hidratantes, revelando información clave sobre este popular producto.
¿Qué es Electrolit y para qué se utiliza?
Antes de juzgar sus componentes, es crucial entender qué es Electrolit: se trata de un suero oral formulado para reponer líquidos y minerales (electrolitos como sodio, potasio, calcio y magnesio) que el cuerpo pierde rápidamente. Su uso está indicado en situaciones muy específicas, deshidratación por diarrea o vómito, ejercicio intenso o exposición prolongada al calor. Sin embargo, la Profeco es enfática al respecto, pues esta bebida no está diseñada para sustituir al agua en la hidratación diaria, su formulación es especializada.
¿Qué dice Profeco sobre el contenido de azúcar en Electrolit?
El estudio de calidad de Profeco evaluó el etiquetado, la calidad sanitaria, los minerales y, por supuesto, el nivel de azúcares y sodio. Los resultados confirmaron que Electrolit cumple con los estándares sanitarios y de contenido neto. En cuanto a la glucosa, que es el componente que generó la polémica, el análisis encontró que la presentación de 625 ml contiene aproximadamente 31 gramos de glucosa añadida (unos 5 gramos por cada 100 ml). Según Profeco, estos valores no son alarmantes si el producto se consume de forma puntual y bajo indicación, es decir, para el propósito para el que fue diseñado: rehidratación clínica o post-ejercicio extremo.
Precauciones en el consumo de Electrolit
A pesar de que la bebida es eficaz en su función rehidratante, la Procuraduría emite una clara advertencia: los problemas de salud surgen cuando se convierte en una bebida de consumo habitual o sustituto del agua simple. El riesgo del consumo constante radica en varios puntos:
- Desequilibrio electrolítico: Si no existe una pérdida evidente de minerales (por enfermedad o esfuerzo), beber suero de manera constante puede alterar el balance natural de sales en el organismo.
- Carga de sodio y glucosa: Un consumo diario eleva innecesariamente la ingesta de sodio y glucosa, lo que puede ser especialmente perjudicial para personas con condiciones preexistentes como hipertensión, diabetes o problemas renales.
- Falsa hidratación: Se crea la errónea creencia de que Electrolit hidrata igual o mejor que el agua, desviando a las personas de la opción más saludable.
El veredicto de la Profeco es un llamado a la moderación y la información. El Electrolit es un buen producto para la rehidratación en casos específicos, cumpliendo su función de suero oral. Sin embargo, no debe tomarse como una bebida refrescante o de rutina, la mejor y más segura opción para la hidratación diaria, siempre será el agua simple.