Tulum.- La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) ha tomado medidas drásticas al colocar sellos de suspensión en el hotel Diamante K, ubicado en la zona turística de Tulum, Quintana Roo, y propiedad del reconocido empresario y actor Roberto Palazuelos. Esta acción es parte de un operativo de verificación que ha sorprendido tanto a turistas como a residentes locales.
Motivos de la Suspensión
La suspensión del hotel se deriva de múltiples denuncias por incrementos injustificados en las tarifas de hospedaje y servicios. Profeco ha recibido quejas de visitantes y habitantes que han señalado cobros excesivos y prácticas que van en contra de la Ley Federal de Protección al Consumidor (LFPC). Durante el operativo, se revisaron 29 negocios en Tulum, incluyendo hoteles, restaurantes y tiendas de conveniencia.
Irregularidades Detectadas
En el marco de este operativo, se centró la inspección en la zona conocida como Parque Jaguar, donde se analizaron 22 establecimientos. En el caso del hotel Diamante K, se detectó que el precio máximo de una habitación doble alcanzó los 13,860 pesos, cifra considerablemente superior al promedio local. Además, Profeco identificó diversas violaciones a la LFPC, tales como la falta de exhibición clara de tarifas y la ausencia de términos y condiciones adecuados en los servicios ofrecidos.
Otras Sanciones y Protección al Consumidor
La suspensión del hotel de Palazuelos forma parte de un operativo más amplio que también ha sancionado a otros tres complejos turísticos en la zona: Pocna Tulum, Villa Pescadores y Cabañas Playa Condesa. La Profeco enfatiza que estas acciones tienen como objetivo proteger la economía de los consumidores y asegurar que los servicios turísticos se ajusten a la normativa vigente. Con precios exorbitantes en alimentos y bebidas, la situación pone en evidencia la necesidad de una regulación más estricta en el sector turístico.
