Jorge Luis Borges fue un escritor de cuentos, ensayos y poemas argentino; considerado una figura clave tanto para la literatura en habla hispana como para la literatura universal.
Hoy se cumplen 121 años de su nacimiento, y en La Magazín nos gustaría recordar a este gran escritor a través de uno de sus poemas más emblemáticos: El Golem.
El Golem fue escrito en 1958 y es uno de los más significativos e indescifrables de toda su carrera. Existen meditaciones extensas de este poema, pues en él se muestran reflexiones entre el infinito y el espacio; así como las consecuencias de irrumpir en la armonía del universo.
Nuestra recomendación de hoy es que escuches este poema. Estamos seguros que te dejará las mismas preguntas que a nosotros.
Después de escucharlo puedes continuar leyendo nuestra pequeña interpretación del mismo:
¿Es posible que el hombre imite a Dios y que el resultado de su creación tenga éxito?
Lo más probable es que no.
Teniendo en cuenta que Dios ha tenido como resultado al ser humano, que la perfección nunca fue encontrada y que se considera al hombre como un intento fallido, entonces…
¿Por qué el hombre pretende imitar a Dios?
… aún sabiendo que nosotros como resultado de su creación somos imperfectos.
Debe ser por la ambición del poder, por la necesidad de demostrar la superioridad ante los demás, por lograr un máximo conocimiento adquirido y comprender los misterios a los que aún no encontramos respuesta.
Borges no concluye la historia, pues su objetivo no es contarla como es, sino que surja el cuestionamiento; haciendo de la divinidad una cosa humana y viceversa.
SM