Cada año hay un comercial que sobresale de entre todos los que se presentan en el Super Bowl. En esta ocasión, Cadillac logró ganarse a los espectadores con un emotivo comercial que trajo de vuelta al emblemático personaje de Tim Burton: Edward Scissorhands. Sin embargo no es este quien aparece en pantalla, sino su hijo, interpretado por Timothée Chalamet. Además Winona Ryder retoma el papel de Kim Boggs y es la madre de Edgar.
Timothée utilizó un traje de cuero inspirado en los diseños originales de Colleen Atwood. El actor publicó una foto detrás de cámaras del anuncio.
El anuncio sirve de secuela a la película, y presenta la vida de Edgar, quien heredó las manos de tijera de su padre y con ello una serie de problemas con tareas simples como jugar futbol americano o viajar en autobús. Así, la automotriz le presenta una solución con el Cadillac LYRIQ y su sistema de conducción manos libres.