La Doble Moral del Tlatoani No. 18
Hace algunos años, cuando Andrés Manuel López Obrador quería ser presidente de México, utilizaba un discurso que fuera agradable al oído para recolectar simpatizantes. Entre sus muchas promesas, aseguraba mejorar la vida le los jóvenes mexicanos impulsado la cultura y el deporte. El día de hoy, a cinco años de su gobierno, se puede percibir con ironía dicha declaración.
La administración encabezada por López ha eliminado múltiples apoyos, instituciones publicas y becas que impulsaban el arte y la cultura en México. Mientras tanto, los pocos organismos que fomentan el deporte sobresalen por una pésima gestión.
Esta semana resalta la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (CONADE) debido a su inútil y cínica labor. Las nadadoras de la Federación Mexicana de Natación no recibieron los recursos económicos necesarios para financiar las competencias donde participan. A pesar de que la comisión les dio la espalda, las deportistas demostraron su profesionalismo y ganaron el primer lugar de la copa del mundo de natación artística.
¿Con qué cara el gobierno federal se atreve a felicitar a las nadadoras cuando les negó el apoyo? Ellas fueron a competir sin recursos y ganaron sin ayuda de la comisión responsable de impulsar el deporte. Como institución pública, de poco sirve un tweet a manera de felicitación si no cumples con tu trabajo; proveer. ¿Se debe permitir que el gobierno de México se cuelgue la medalla del éxito mientras demuestran una gestión inepta?´.
Sinvergüenza
Por su parte, la directora de la CONADE, Ana Gabriela Guevara calificó de chantaje y denigrante la actitud del equipo mexicano de nado sincronizado. “Me convocan para hablar de un problema que no es problema“, dijo Guevara queriendo deslindarse cínicamente de su responsabilidad.
La funcionaria quiso evadir su obligación con un manipulador discurso que pretendía cambiar la narrativa y culpar a las nadadoras así como a los medios de comunicación, misma estrategia que utiliza AMLO en sus conferencias.
¿Cómo es posible que una ex deportista sea capaz de quitarle el apoyo económico a nuevas generaciones?, el actuar de la directora, sumado a su actitud prepotente, es la representación más fiel de todo el gobierno federal; ineptitud, cinismo e insolencia. ¿Los mexicanos merecemos ese trato?.
Así como Florencia Serranía Soto se defendió descaradamente ante los incendios e irregularidades del metro diciendo: “Yo soy la directora general del metro, solamente“. Ahora Ana Gabriela Guvara se deslinda de manera impertinente comentando: “Estoy amarrada de manos“.
Y mientras tanto, ¿El gobierno federal buscará a los y las responsables del error?, ¿Pedirán disculpas e intentarán reparar los daños?, ¿Los culpables pagarán por las equivocaciones en la CONADE para que no vuelva a ocurrir?. La auto proclamada “Cuarta Transformación” ya nos ha demostrado que solo van a ignorar el problema y defender a Guevara; La estampa perfecta de la insolencia.
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