Organizaciones civiles buscan rescatar la milpa en el Día Nacional del Maíz
En México, el Senado de la República estableció el 29 de septiembre como el Día Nacional del Maíz, y en esta fecha diversas organizaciones civiles buscan promover y proteger la milpa, un sistema de cultivo de origen mesoamericano que tiene como base el maíz. La milpa se presenta como una alternativa ante los incrementos en el precio de los alimentos, la crisis climática y el uso de semillas transgénicas.
El colectivo Coamil creó hace siete años una milpa en la ciudad de Guadalajara, específicamente en el camellón de la avenida Federalismo, una de las más transitadas de la ciudad. Este espacio es utilizado para cultivar diferentes plantas, desde maíz hasta girasoles, incluso debajo de ellas pasa el tren subterráneo.
Antonio Aguirre, uno de los fundadores del colectivo Coamil, ha unido fuerzas a la campaña “Sin maíz no hay país” en contra del uso de semillas transgénicas. Explicó a EFE que intervinieron el espacio público para que los vecinos conozcan los saberes ancestrales relacionados con la milpa. El maíz, en particular, ha sido un alimento fundamental desde la época prehispánica, tanto en el aspecto alimenticio como cultural.
Un alimento prehispánico
Según la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural de México, la milpa es un sistema agrícola que data de la época prehispánica y se basa en sembrar diferentes alimentos para aprovechar de manera óptima la tierra. Aunque existen diversas formas de cultivo en la milpa, la combinación principal se centra en el maíz, además de frijol, calabaza y chile, que son la base de la gastronomía mexicana.
Melina Gil, vocera del colectivo Coamil, describió que este sistema beneficia la alimentación comunitaria sana y sustentable, así como el medioambiente. La interacción de las plantas en la milpa es fundamental, ya que el maíz proporciona so