Ricardo Anaya, excandidato a la Presidencia de México, ha emergido como un crítico de la reforma al Poder Judicial propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador. Anaya ha señalado la necesidad de cambios estructurales en el sistema de justicia, argumentando que existen “jueces de consigna” que operan bajo órdenes específicas, lo que compromete la imparcialidad del sistema judicial en el país.
La experiencia de Anaya con el sistema judicial
En declaraciones recientes, Anaya compartió su experiencia personal, mencionando que se vio obligado a autoexiliarse en Estados Unidos debido a un caso que consideró injusto y que estaba destinado a ser manejado por un juez de consigna. Este caso, relacionado con la investigación de la Fiscalía General de la República (FGR) por el escándalo de Odebrecht, implicó acusaciones de corrupción que, según él, son parte de una persecución política orquestada por el actual gobierno.
Críticas a la reforma judicial de López Obrador
A pesar de su situación legal, Anaya ha sido aprobado por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) para una candidatura plurinominal al Senado. Sin embargo, no ha dudado en criticar la reforma judicial impulsada por Morena, afirmando que esta no es la solución adecuada y que, en realidad, podría empeorar la situación actual del Poder Judicial. Según él, la propuesta busca monopolizar el proceso de selección de jueces, lo que podría convertir al Poder Judicial en un apéndice del Ejecutivo.
El futuro del Poder Judicial en México
Anaya concluyó que la reforma tal como está planteada podría dar al partido en el poder un control excesivo sobre la selección de jueces, lo que sería perjudicial para la independencia del sistema judicial. “Lo que vamos a tener es un Poder Judicial que se va a convertir en un apéndice del Poder Ejecutivo”, advirtió, subrayando la urgencia de una reforma que realmente aborde los problemas estructurales en lugar de perpetuar el status quo.