Rafael Caro Quintero, cofundador y exlíder del Cártel de Guadalajara, se declaró no culpable de múltiples cargos que incluyen narcotráfico, organización criminal, uso de armas de fuego y asesinato en la corte federal del Distrito Este de Nueva York. La audiencia, que tuvo lugar el 28 de febrero, marcó un momento significativo en la historia del narcotráfico, dado que Caro Quintero enfrenta la posibilidad de una sentencia de cadena perpetua o incluso pena de muerte, según lo indicado por el Departamento de Justicia de Estados Unidos.
Despliegue de Seguridad en la Audiencia
La llegada de Caro Quintero a Estados Unidos fue acompañada por un impresionante despliegue de seguridad, con más de un centenar de agentes de la DEA y otros funcionarios del Departamento de Justicia presentes en la sala. Este operativo refleja la gravedad de los cargos que enfrenta el narcotraficante, quien ha sido un fugitivo durante décadas. La fiscal Saritha Komatireddy destacó que, después de 40 años, la justicia finalmente ha alcanzado a Quintero, quien es acusado de haber ordenado el asesinato del agente de la DEA, Enrique ‘Kiki’ Camarena, en 1985.
Los Cargos que Enfrenta Caro Quintero
Caro Quintero es conocido por su oscuro historial delictivo, acumulando una fortuna estimada en casi 500 millones de dólares. Se le atribuye el secuestro y asesinato de Camarena, lo que llevó a las autoridades estadounidenses a ofrecer una recompensa de hasta 20 millones de dólares por su captura. A pesar de haber sido detenido en 1985, su liberación en 2013, tras la anulación de varias causas en su contra, permitió que el narcotraficante recuperara su libertad, aunque no por mucho tiempo.
Un Cambio Drástico en el Proceso Judicial
El 22 de febrero, un tribunal colegiado había confirmado una suspensión que impedía el traslado de Caro Quintero a Estados Unidos, argumentando que el juicio de extradición aún estaba en curso. Sin embargo, el 27 de febrero, las autoridades mexicanas llevaron a cabo una operación sin precedentes que resultó en la entrega de 29 narcotraficantes, incluido Quintero, a Estados Unidos. Esta acción marca un nuevo capítulo en la lucha contra el narcotráfico y la búsqueda de justicia por los crímenes cometidos por el exlíder del cártel.