La aclamada banda Imagine Dragons ha dado un paso más en su exitosa carrera al llevar su música a la gran pantalla. Con un concierto que reunió a más de 67.000 fanáticos en el icónico Hollywood Bowl de Los Ángeles, la banda presentó un espectáculo inolvidable, acompañado por la LA Film Orchestra y dirigido por el talentoso Inon Zur. Este evento no solo celebró su trayectoria musical, con temas emblemáticos como Radioactive y Whatever It Takes, sino que también se convirtió en una experiencia cinematográfica única, programada para proyectarse en cines el 26 y 29 de marzo bajo el título Imagine Dragons: Live From The Hollywood Howl.
Una experiencia cinematográfica única
Gracias a la iniciativa +QueCine de Yelmo, los seguidores de la banda tuvieron la oportunidad de disfrutar de esta película que captura la esencia del concierto. Desde la poderosa apertura orquestal de Fire in These Hills hasta el electrizante Thunder, el espectáculo fue un viaje emocional que resonó profundamente en los asistentes. Durante el evento, el vocalista Dan Reynolds compartió su visión sobre el poder de la música para unir a las personas en tiempos de división, lo que generó una conexión palpable con el público.
Historias detrás de las canciones
El concierto no solo se trató de música, sino también de contar historias. Los espectadores tuvieron la oportunidad de conocer el trasfondo de canciones como Follow You y Bad Liar, donde Reynolds enfatizó la importancia de la salud mental y el valor de vivir plenamente. Una de las historias más conmovedoras fue la relacionada con It’s Time, que dejó a la audiencia emocionada. Dan compartió un recuerdo de sus inicios, cuando un joven llamado Jesse Robinson le pidió que cantara esta canción en honor a su hermano Tyler, quien estaba luchando contra el cáncer.
La creación de una fundación con propósito
La emotiva narración culminó en lágrimas cuando Reynolds reveló que Tyler había fallecido poco después de aquel concierto. Para honrar su memoria, la banda fundó The Tyler Robinson Foundation, que se dedica a apoyar a familias que enfrentan el cáncer pediátrico. Desde su creación en 2013, la fundación ha trabajado incansablemente para brindar ayuda y esperanza. La historia de Tyler ha dado un nuevo significado a It’s Time, convirtiendo esta canción en un himno de resiliencia y solidaridad que resonará en los corazones de los fanáticos por muchos años más.