El LOS40 Primavera Pop es más que un simple festival; es una tradición que ha marcado el inicio de la primavera en España durante más de dos décadas. Desde su primera edición en 2005, este evento ha evolucionado y crecido, convirtiéndose en un referente musical que reúne a miles de seguidores cada año. La conexión emocional que muchos tienen con este festival se ve reflejada en su historia, que comenzó en Leganés y ha recorrido varias ciudades, adaptándose a las necesidades de su público y la industria musical.
Un recorrido por la historia del festival
La primera edición de LOS40 Primavera Pop se celebró en 2005, cuando la emisora aún era conocida como Los 40 Principales. Desde su modesto inicio, el festival ha crecido significativamente, pasando de unos pocos miles de asistentes en vivo a cientos de miles de personas que disfrutan del evento a través de retransmisiones en línea y radiofónicas. En 2025, se celebrará una nueva edición, prometiendo un cartel espectacular y la participación de artistas que han marcado la historia musical del país.
Artistas y escenarios a lo largo de los años
Más de 250 artistas han pisado los escenarios de LOS40 Primavera Pop en sus 19 ediciones, convirtiéndolo en uno de los festivales más importantes de la música pop en España. Desde Lady Gaga hasta Melendi, el festival ha sido la plataforma de lanzamiento para muchos artistas que hoy son grandes nombres en la industria. A lo largo de los años, el festival ha cambiado de sede, pasando por diversas ciudades como Madrid, Barcelona y Málaga, y adaptándose a diferentes escenarios, desde la Cubierta de Leganés hasta el Pabellón Olímpico de Badalona.
Un evento solidario y multitudinario
Con más de 350.000 espectadores en vivo a lo largo de sus ediciones, LOS40 Primavera Pop no solo ha sido un evento musical, sino también una iniciativa solidaria. En sus primeras ediciones, el acceso era gratuito, pero con el tiempo se implementó un precio de entrada destinado a causas benéficas. Este enfoque no solo ha permitido que el festival continúe creciendo, sino que también ha creado un sentido de comunidad entre los asistentes, quienes no solo disfrutan de la música, sino que también contribuyen a un propósito mayor.