La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, anunció en una reunión con líderes sindicales, con motivo del Día del Trabajo, que se implementará una reducción gradual de la jornada laboral a 40 horas semanales, con un plazo establecido para su cumplimiento en enero de 2030. Esta medida, que ha estado en el centro del debate laboral, busca atender una demanda histórica de los trabajadores mexicanos.
Foros para definir el nuevo esquema laboral
Para llevar a cabo esta transición, Sheinbaum indicó que se convocará a foros entre trabajadores, empresarios, académicos y otros interesados. Estos encuentros se realizarán del 2 de junio al 7 de julio y estarán organizados por la Secretaría del Trabajo. El objetivo es establecer un diálogo para construir una propuesta que permita implementar la jornada laboral de 40 horas de manera gradual y consensuada.
Compromiso con el diálogo social
Marath Baruch Bolaños, secretario del Trabajo, enfatizó que esta iniciativa es parte de un compromiso asumido por la presidenta desde el inicio de su administración. Aseguró que se escuchará a todas las partes involucradas para lograr un acuerdo que beneficie a trabajadores y empleadores por igual. La intención es crear un nuevo panorama laboral que no solo respete los derechos de los trabajadores, sino que también fomente la productividad.
Impacto positivo de la reducción de horas laborales
Bolaños destacó que diversos estudios han demostrado que reducir las horas de trabajo no disminuye la productividad, sino que, por el contrario, mejora la calidad de vida de los trabajadores. Esta propuesta se enmarca dentro de la política laboral de la Cuarta Transformación, que busca no solo avanzar en derechos laborales, sino también en la dignificación del trabajo en México. La presidenta Sheinbaum reafirmó su compromiso de devolver a los trabajadores horas de su vida, valorizando así el esfuerzo que realizan cada semana.