La agrupación sinaloense, Los Alegres del Barranco, apareció en medio de una investigación por apología al delito y aseguró que no conocen al CJNG y al Mencho.

La agrupación sinaloense Los Alegres del Barranco ha quedado en el ojo del huracán tras ser vinculados a un proceso judicial por presunta apología al delito. La controversia comenzó cuando se difundieron imágenes del líder del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) durante sus presentaciones, lo que llevó a las autoridades a investigar su relación con el narcotráfico.
Los Alegres del Barranco rompen el silencio
En respuesta a las acusaciones, el vocero de la banda, Luis Alvarado, declaró que no buscan enaltecer a Nemesio Oseguera Cervantes, conocido como “El Mencho”. Aseguró que las imágenes utilizadas son de dominio público y que su intención no es glorificar al capo. Alvarado enfatizó que la agrupación nunca ha tenido contacto con el CJNG y que sus letras no incitan a la violencia, sino que describen hechos culturales de México.
Impacto en su carrera musical
A pesar de que la controversia ha aumentado la popularidad de sus canciones, Los Alegres del Barranco enfrentan serias repercusiones. Han cancelado varios conciertos y enfrentan restricciones judiciales que les impiden salir de Jalisco. Este contexto se enmarca en una campaña del gobierno mexicano para limitar la difusión de narcocorridos, lo que ha llevado a un aumento en la demanda de este tipo de música entre los jóvenes.
Libertad de expresión en juego
El grupo considera que su situación es una lucha por la libertad de expresión. Alvarado afirmó que su música refleja la realidad del país y que no debe ser censurada. La polémica ha generado un debate sobre el papel de la música en la sociedad y su relación con la cultura del narcotráfico, planteando interrogantes sobre la moralidad en la expresión artística.