El jurado encargado de deliberar sobre el nuevo Caso Harvey Weinstein en Nueva York se mostró muy dividido este lunes, durante su tercera jornada de reflexión, y se solicitó al juez encargado Curtis Farber que les aclarara las normas de la deliberación y qué hacer ante una situación de desacuerdo.
Acusaciones contra Harvey Weinstein
Weinstein está acusado por tres mujeres de dos agresiones sexuales en primer grado y de una violación en tercer grado, que podrían acarrearle hasta 25 años por los dos primeros delitos y un máximo de cuatro por el tercero.
División en el jurado
El lunes por la mañana, los miembros del jurado enviaron dos notas al magistrado: en la primera solicitaban información acerca de las reglas de la deliberación y del concepto de ‘duda razonable’, y en la segunda pedían conocer mejor cómo resolver un escenario de profundo desacuerdo, en el que aparentemente se encuentran.
Proceso de deliberación
Las deliberaciones de un jurado deben terminar con un veredicto consensuado de culpabilidad o no culpabilidad, y por ello en los casos más delicados las discusiones se prolongan durante varios días, hasta que una mayoría convence a los más reticentes.
Conversación privada con el juez
Además, la persona encargada de asumir la presidencia del jurado comunicó al juez que quería hablar con él “sobre una situación que no es muy buena”. Weinstein renunció a su derecho a estar presente en esa conversación, que se celebró en privado y fuera del alcance de la prensa.
Defensa de Weinstein
“La gente está considerando como pruebas cosas que no se aportaron a este juicio (…) Hay miembros que están presionando para que se cambie de opinión. No es justo. Están hablando del pasado”, expresó el abogado principal de Weinstein, Arthur Aidala, al juez del Tribunal Supremo del estado de Nueva York tras salir de dicha reunión.
Regla Molineux y acusaciones de parcialidad
Sin embargo, durante el proceso la Fiscalía ha seguido cuidadosamente la conocida como ‘regla Molineux’, que generalmente prohíbe utilizar como prueba comportamientos cuestionables anteriores de un acusado para demostrar su propensión a cometer los delitos por los que se le juzga.
Aidala, por su parte, continuó asegurando que “hay un miembro del jurado contaminado” y que esto obligaría a la anulación del juicio; petición que fue denegada por Farber.
Progreso en las deliberaciones
Posteriormente, el juez llamó al jurado de cara a responder a sus dudas en esta deliberación, y una de las integrantes permaneció luego en la sala para manifestar que “el tono (de las conversaciones internas) es muy diferente hoy” con respecto a la semana pasada y que estaban avanzando.
Solicitudes del jurado
Durante las deliberaciones, el jurado ha solicitado antes en diversas ocasiones a las partes revisar el historial médico de la denunciante Jessica Mann, así como algunos de sus intercambios de correos electrónicos y una transcripción del testimonio de Kaja Sokola y Miriam Haley, que fueron presentados como pruebas por la Fiscalía.
Conducta inapropiada en el jurado
Además, el viernes otro de los jurados alertó al juez Farber que algunos de sus compañeros habían discutido sobre el caso en ausencia del resto y fuera de la sala habilitada para ello.
Ese mismo miembro pidió más tarde sin éxito ser descartado del proceso de deliberaciones tras supuestamente haber presenciado alguna conducta intimidatoria por parte de algún integrante del panel hacia otros compañeros, lo que calificó de “injusticia”.
Incidente de salud en el jurado
En la primera sesión, el jueves pasado, cuando ya se preveía que este jurado -conformado por siete mujeres y cinco hombres- fuera enviado a deliberar, una de las miembros del panel se ausentó aduciendo que estaba sufriendo de ansiedad e incluso vomitando, por lo que, a pesar de que la defensa requirió infructuosamente que se esperara a su reincorporación, fue sustituida por una suplente.
Con información de EFE