El reciente retiro de las estatuas del ‘Che’ Guevara y Fidel Castro en la colonia Tabacalera de la Ciudad de México ha provocado un intenso debate entre funcionarios locales, así como reacciones en la comunidad cubana en el país. La alcaldesa de Cuauhtémoc, Alessandra Rojo de la Vega, defendió la decisión argumentando que fue a solicitud de los vecinos, quienes pidieron recuperar sus espacios públicos y denunciaron que las estatuas habían sido instaladas sin los permisos correspondientes.
Controversia por el Retiro de las Estatuas
Rojo de la Vega aseguró que no existe documentación que avale la instalación de las esculturas en el Jardín Tabacalera, y enfatizó que “ni el Che ni Fidel pidieron autorización para instalarse en Cuba… y tampoco en la Tabacalera”. Su postura se basa en la falta de un permiso oficial que respalde la presencia de las estatuas, que, según ella, estaban bajo el resguardo irregular de un trabajador de la alcaldía.
Respuesta de Citlalli Hernández
La reacción de Citlalli Hernández Mora, secretaria de las Mujeres, no se hizo esperar. Criticó el retiro de las estatuas, señalando que la decisión responde a “una agenda trastornada de derecha”. La discusión se intensificó, con Rojo de la Vega defendiendo su postura al afirmar que “las dictaduras y los regímenes represores son malos vengan de donde vengan”, mientras que Hernández retuiteó un mensaje que recordaba la autorización previa para la instalación de las esculturas.
Reacciones de la Comunidad Cubana
La controversia ha llevado a la comunidad cubana en México a convocar a una marcha para exigir la restitución de las estatuas, que simbolizan la reunión de Castro y Guevara en 1955. El embajador de Cuba en México, Marcos Rodríguez Costa, expresó que “la verdadera Revolución no es de piedra ni bronce”, mientras que el Movimiento Mexicano de Solidaridad con Cuba condenó el retiro como una agresión a la historia compartida entre México y Cuba. La situación continúa generando reacciones y polarizando opiniones entre los ciudadanos y los funcionarios.