Se cumple un año desde que el Cártel de Sinaloa sufrió uno de sus golpes más sensibles como organización criminal. El pasado 25 de julio de 2024 se dio el arresto de Ismael ‘El Mayo’ Zambada y de Joaquín Guzmán López, hijo de ‘El Chapo’, en un aeródromo cercano a El Paso, Texas.
Conflictos Internos en el Cártel de Sinaloa
Desde aquel histórico arresto por parte de las autoridades de Estados Unidos, se desencadenaron diversos acontecimientos que impactaron a varios miembros del Cártel de Sinaloa, entre ellos conflictos entre facciones, sentencias judiciales y acuerdos de culpabilidad. Actualmente, Ismael ‘El Mayo’ Zambada enfrenta un proceso judicial en el Distrito Este de Nueva York, donde se le imputan 17 cargos federales relacionados con el narcotráfico, la portación y distribución de armas de fuego, así como el lavado de dinero.
Lucha de Poder entre ‘La Mayiza’ y ‘Los Chapitos’
A poco menos de tres meses del arresto de Ismael ‘El Mayo’ Zambada, comenzó una lucha de poder entre las principales facciones del Cártel de Sinaloa: ‘La Mayiza’ y ‘Los Chapitos’. Estas agrupaciones criminales están encabezadas por los hijos de los antiguos líderes del cártel. La facción conocida como ‘Los Chapitos’ está comandada por los hermanos Iván Archivaldo y Jesús Alfredo Guzmán Salazar, mientras que ‘La Mayiza’ está liderada por Ismael Zambada Sicairos, alias ‘Mayito Flaco’.
Consecuencias de la Guerra Interna
El enfrentamiento entre las dos facciones ha desatado una crisis de inseguridad en Sinaloa, con un saldo superior a mil 552 personas asesinadas y mil 862 personas reportadas como desaparecidas en distintos municipios del estado. La facción de ‘Los Chapitos’ es la que más se ha visto mermada por los enfrentamientos y los operativos de seguridad en Sinaloa, con arrestos de varios operadores importantes. En este contexto, la lucha por el control del cártel continúa, mientras las autoridades siguen presionando para desmantelar sus operaciones.