La reciente campaña publicitaria de American Eagle, protagonizada por la actriz Sydney Sweeney, ha generado una intensa controversia en redes sociales debido a un juego de palabras que muchos han interpretado como una referencia a ideologías racistas. La marca, que buscaba promocionar su colección de otoño, se ha visto envuelta en un debate sobre la supremacía blanca y mensajes subliminales, lo que ha desatado una ola de críticas entre los usuarios.
El juego de palabras que desató la polémica
En uno de los anuncios, Sweeney menciona: “Los genes se heredan de padres a hijos… Mis jeans son azules”, mientras la cámara destaca sus ojos del mismo color. Otro fragmento del anuncio presenta un cartel que inicialmente dice “Sydney Sweeney tiene grandes genes” y que luego modifica a “jeans”. Aunque el objetivo era un juego fonético, muchos interpretaron el mensaje como una exaltación de los “buenos genes” asociados a características arias, como ser mujer blanca, rubia y de ojos azules.
Reacciones y análisis sobre el mensaje
La doctora Sayantani DasGupta, experta en Medicina Narrativa, analizó el contenido en TikTok, considerándolo un ejemplo moderno de narrativa eugenésica. Este tipo de discurso ha sido utilizado históricamente para justificar la esterilización forzada y otras formas de discriminación. A pesar de que parte de las ganancias de la campaña se destinarían a la organización de salud mental Crisis Text Line, la controversia ha eclipsado la iniciativa.
Impacto en la imagen de American Eagle
A pesar de no haber emitido ningún comunicado, American Eagle ha visto un aumento del 15% en el valor de sus acciones, lo que equivale a un incremento de 310 millones de dólares en su valor de mercado. Mientras algunos consideran esta omisión como insensibilidad, otros argumentan que la controversia fue intencionada para generar visibilidad. Sydney Sweeney, a sus 27 años, continúa siendo una figura influyente en la cultura pop, aunque sus decisiones publicitarias arriesgadas la han llevado a ser objeto de críticas, como ocurrió anteriormente con su colaboración para vender jabón hecho con el agua en la que se bañó.