El Lollapalooza Chicago ha iniciado su nueva edición este 31 de julio, destacando a Tyler, The Creator y Luke Combs como los principales artistas del evento. Sin embargo, uno de los momentos más esperados del primer día fue la actuación de Role Model, un joven talento que ha comenzado a capturar la atención del público. Cientos de jóvenes se reunieron para disfrutar de su música, impulsados en parte por la reciente aparición de la actriz Natalie Portman en uno de sus conciertos, donde se dejó llevar por el ritmo de su tema Sally, When the Wine Runs Out.
La conexión entre Role Model y Natalie Portman
La curiosidad por Role Model ha crecido gracias a su colaboración en la película Good Sex, dirigida por Lena Dunham, donde también participan actores como Meg Ryan y Mark Ruffalo. Este proyecto marca el debut cinematográfico de Tucker Pillsbury, nombre real del artista, y ha reforzado su presencia en la industria musical. Durante su actuación en Chicago, compartió el escenario con The Dare, con quien demostró una conexión genuina a través de un amistoso abrazo.
¿Quién es Role Model?
Role Model, conocido como el chico triste del pop, ha conquistado a la Generación Z con su estilo que mezcla pop alternativo y R&B. Con letras sinceras y una voz suave, su música se ha convertido en la banda sonora de aquellos que navegan por el amor y la ansiedad. A pesar de sus inicios en el rap, Tucker decidió cambiar de rumbo y crear un proyecto musical que refleja vulnerabilidad y autenticidad, alejándose de las producciones exageradas.
Un artista auténtico y cercano
En canciones como Forever & more, Blind y Notice me, Role Model aborda temas universales como el amor, la obsesión y la pérdida, resonando profundamente con su audiencia. Su álbum Rx (2022) retrata el amor como una medicina, una adicción que abraza y transforma en arte. A través de su estética relajada y su enfoque minimalista, Role Model se presenta como el anti-estrella que prefiere la sinceridad a la perfección, conectando con una generación que busca autenticidad en un mundo saturado de superficialidades.