¿Eres de las personas que les gusta endulzar su día con un poco de Yogur? ¡Aguas! Porque ese antojo podría no ser tan nutritivo como crees. La Profeco, en su más reciente estudio, desenmascaró a varias marcas populares de yogur que prometen ser la opción perfecta para cuidar la línea, pero en realidad te están engañando.
Resultados del Estudio de Profeco sobre Yogures
Según un informe detallado en la Revista del Consumidor, el organismo analizó 25 productos, incluyendo versiones griegas, deslactosadas, bajas en grasa y sin azúcar, y los resultados te van a dejar con el ojo cuadrado. Resulta que algunos de los yogures más caros no son necesariamente los mejores. De hecho, varios de ellos contienen ingredientes que no son nada recomendables, sobre todo para los más pequeños de la casa.
Marcas de Yogur que NO Recomienda Profeco
Una de las principales alertas que encendió la Profeco es el uso de edulcorantes sin calorías como la stevia, la fruta del monje, la sucralosa o el acesulfame. Aunque no tienen calorías, su consumo no es ideal para los niños, pues su sabor puede alterar la percepción natural del gusto y, a largo plazo, crear una preferencia por lo excesivamente dulce. Entre las marcas señaladas, que seguro has visto en el súper, se encuentran Chobani Zero Sugar, Lala griego zero, y Vitalínea.
Etiquetas Engañosas en el Yogur
Pero el problema no termina con los edulcorantes, pues la Profeco también encontró que varias marcas mienten en sus etiquetas. Algunos productos no declaran correctamente su peso neto, y otros reportan cantidades inexactas de nutrientes clave como proteínas y azúcares. El informe destaca a Yoplait griego sin azúcar y Yoplait griego skyr, que no cumplían con el peso neto que prometían. Además, la marca Onei presentó valores incorrectos de proteínas y azúcares. Con estos resultados, la Profeco nos recuerda que no debemos confiar ciegamente en el empaque. La próxima vez que vayas a la tienda a comprar yogur para tus hijos o para ti, tómate un momento para revisar la letra chiquita, al final, más vale estar bien informado que caer en la trampa.