Desastre en México: Fuertes lluvias dejan 47 muertos y numerosos desaparecidos
Las intensas lluvias que han azotado diversas regiones de México han dejado un saldo trágico de al menos 47 muertos y un número indeterminado de personas desaparecidas. La presidenta Claudia Sheinbaum se reunió con damnificados en Veracruz, donde recibió gritos de desesperación de la población, quienes exclamaron “¡Ya huele a muerto!” durante su visita. Las cifras oficiales indican que los decesos se distribuyen en varios estados: 18 en Veracruz, 12 en Puebla, 16 en Hidalgo y un niño de 6 años en Querétaro, aunque el gobierno de Hidalgo reporta un total de 22 muertes.
Impacto devastador en infraestructura y comunidades
La devastación provocada por las lluvias ha afectado a 150 municipios en Veracruz, Puebla, Hidalgo, San Luis Potosí y Querétaro, con más de 48,000 viviendas dañadas. Aún hay 259 localidades incomunicadas, y se han registrado 108 interrupciones en 18 carreteras federales, de las cuales se han atendido 103. La presidenta Sheinbaum anunció la instalación de 79 albergues temporales para acoger a los afectados y un censo para la distribución de apoyos, incluyendo alimentos y servicios médicos.
Operativo de ayuda: Marina y Sedena en acción
Las Secretarías de Marina y Defensa han desplegado un amplio operativo de ayuda en las zonas más afectadas. Más de 6,000 elementos de la Defensa Nacional y 3,000 de la Marina están trabajando en tareas de limpieza, remoción de escombros y entrega de despensas. Se han establecido cocinas móviles con capacidad para preparar hasta 1,800 raciones diarias, y se están utilizando drones para la búsqueda de personas desaparecidas y la evaluación de daños en las áreas más impactadas.
Voces de la tragedia: testimonios de los damnificados
Los testimonios de los afectados reflejan la desesperación y el sufrimiento que enfrenta la población. Habitantes de Poza Rica y otras comunidades han perdido prácticamente todo: “No tenemos dónde sentarnos ni dónde acostarnos. Hemos pasado dos noches sin un colchón o cobijas, porque todo se perdió”, lamentó uno de los afectados. La situación es crítica, y muchos reclaman la falta de apoyo gubernamental, señalando que incluso sus compatriotas en el extranjero están organizando ayuda. Las labores de limpieza y recuperación se extenderán por semanas, mientras la comunidad espera una respuesta efectiva ante esta calamidad.