El vocalista de Limp Bizkit, Fred Durst, ha rendido un emotivo homenaje a su compañero de banda, el bajista Sam Rivers, quien falleció a la edad de 48 años. La noticia fue confirmada por el grupo el 18 de octubre, describiendo a Rivers como “el alma del sonido” y una “persona única en la vida”. Hasta el momento, no se ha revelado la causa de su muerte.
Recordando a Sam Rivers
En un video personal compartido en su cuenta de Instagram, Durst reflexionó sobre su larga relación con Rivers, recordando cómo lo conoció en los años 90 mientras intentaba formar una banda en Jacksonville, Florida. “Vi a Sam tocar y me quedé impresionado”, comentó Durst, describiendo la primera vez que escuchó a Rivers en un pequeño bar, donde su talento sobresalía entre otros músicos.
Un viaje musical inolvidable
Durst recordó cómo se acercó a Rivers para invitarlo a unirse a su banda y cómo este recomendó a su primo John Otto como batería. Compartieron innumerables momentos juntos, desde sus primeras sesiones de ensayo en el garaje de Rivers hasta su amor compartido por las bandas de grunge de Seattle. “Es trágico que no esté aquí ahora. He llorado ríos desde ayer”, expresó Durst con profunda tristeza.
El legado de Sam Rivers
Fred Durst concluyó su homenaje diciendo: “Tuve la suerte de tenerlo en mi vida y estoy increíblemente agradecido de haber compartido parte de este viaje con él. Su música y su don seguirán impactando al mundo”. DJ Lethal, compañero de banda, también expresó su dolor, afirmando que Rivers vivirá a través de su música y su legado. Sam Rivers dejó Limp Bizkit en 2015 debido a problemas de salud relacionados con el alcohol, pero regresó a la banda tras recibir un trasplante de hígado.