La presidenta Claudia Sheinbaum encabezó el sábado en Guadalupe y Calvo, Chihuahua, la entrega de más de 3 mil hectáreas de tierra al Pueblo Ódami, una comunidad indígena que ha luchado por el reconocimiento de su territorio ancestral. Este acto de restitución se enmarca dentro del Plan de Justicia de los Pueblos de la Sierra Tarahumara, cuyo objetivo es revertir décadas de despojo y marginación.
Justicia Territorial para el Pueblo Ódami
Durante el evento, Sheinbaum calificó la entrega de tierras como un acto de “justicia territorial”, enfatizando que se trata de devolver oficialmente lo que “siempre fue de ustedes, pero que no había sido reconocido”. La ceremonia se realizó en la comunidad de Santa Tulita, donde la mandataria firmó el decreto que formaliza la propiedad comunal tradicional de las tierras a favor del Pueblo Ódami de Malanoche.
Compromisos de Desarrollo y Bienestar
Además de la restitución de tierras, los habitantes del Pueblo Ódami plantearon necesidades urgentes como electricidad, caminos, escuelas y atención médica. En respuesta, Sheinbaum anunció la implementación de programas de salud, seguridad y desarrollo, así como la incorporación de las familias beneficiadas al programa Sembrando Vida, que busca impulsar la producción agrícola y forestal en la región. También se incrementará el presupuesto del Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social para Pueblos Indígenas y Afromexicanos (FAISPIAM) para el año 2026.
Un Paso Hacia la Reconciliación
Para el Pueblo Ódami, la restitución de tierras representa un acto de reconocimiento y dignidad tras años de despojo territorial. Antonio Ayala Loera, representante de la comunidad, expresó su gratitud por esta medida y la esperanza de que los apoyos continúen para asegurar la preservación cultural y el desarrollo integral de su pueblo. Sheinbaum reafirmó su compromiso de coordinar esfuerzos con las autoridades estatales y la Guardia Nacional para garantizar la seguridad en una región que enfrenta retos significativos.
