Varios comunicadores y periodistas criticaron el nuevo espacio, llamándolo “un distractor” y una “difamación contra la prensa independiente”
Foto: Presidencia de la República

Después de que el Presidente Andrés Manuel López Obrador introdujera una nueva sección a sus conferencias matutinas llamada “Quién es quién en las mentiras“, dedicado a corregir o desmentir noticias sobre su gobierno, varios comunicadores y periodistas criticaron el nuevo espacio, según ellos es “un distractor” y una “difamación contra la prensa independiente”.

La nueva sección estará a cargo de la periodista Ana Elizabeth García Vilchis y tendrá como objetivo “contrarrestar la manipulación y aclarar diversos asuntos relacionados con el ejercicio de la Administración Pública Federal“, de acuerdo a lo dicho en la conferencia matutina del pasado miércoles 30 de junio.

El mandatario federal alertó sobre un momento de crisis en el periodismo mexicano, pero dijo que confiaba en que surgieran cambios en la forma de informar para hacerlo con objetividad, equilibrio y profesionalismo.

“Que no se calumnie, que no haya mentiras. Que se informe con la verdad y que se esté lo más distante que se pueda del poder político y económico y lo más cercano que se pueda al pueblo”, remarcó.

En la primera entrega, García Vilchis cuestionó la veracidad de información publicada en medios como El Universal, El País y Forbes; y señaló a los periodistas Carlos Loret de Mola, Joaquín López-Dóriga, Raymundo Riva Palacios.

La información que se puso en cuestión fue la referente al presunto espionaje contra columnistas de El Universal, el contrato para adquirir vacunas con una “empresa fantasma“, la presencia de basura radioactiva en la central nuclear de Laguna Verde, el saludo del Presidente a un guardia comunitario en Guerrero, y la supuesta toma de un centro educativo en Puebla por la Guardia Nacional.

El periodista Raymundo Riva Palacios dijo, a través de su cuenta de Twitter, que el presidente había “escalado sus ataques a prensa y periódicos” y lo llamó un acto de censura previa.

Con respecto a la supuesta toma de la universidad en Puebla, hecho que le costó la mención en la mañanera, el columnista aclaró que tan solo se limitó a replicar lo que estudiantes y maestros informaban y que, una vez publicados los comunicados oficiales, citó la información para corregir y mejorar los datos.

También desmintió lo dicho en la conferencia matutina sobre que él había sido asesor de noticias para el gobierno de Salinas.

“Es falso. Ni siquiera existía ni existe un puesto de esa naturaleza. Dirigí durante 14 meses Notimex, lo que es público, y la agencia empezó a trabajar en su misión de informar”, precisó el periodista.

En dicha conferencia, el presidente se refirió a Gabriel García Soto, como “el columnista estrella de El Universal“, a lo cual el periodista se limitó a agradecer el calificativo y a reiterar su comentario sobre el fracaso en la seguridad.

Por otra parte, Joaquín López Doriga tuiteo una imagen que comparaba al Presidente con la figura de Joseph Stalin.

Héctor de Mauléon, quien también fue mencionado en la sección, dijo que las acusaciones en su contra eran falsas, ya que él nunca habló del supuesto espionaje en sus columnas.

La politóloga Denise Dresser, calificó a la nueva sección de la mañanera como “un distractor, un circo, un amedrentamiento, un abuso de poder, una práctica autoritaria, un signo de intolerancia al escrutinio crítico“.

Por su parte, la periodista Carmen Aristegui indicó que se trata de un “absoluto despropósito“, ya que el gobierno federal se quiere posicionar como el poseedor de la verdad. “Este ejercicio de decir ‘el que tiene la verdad soy yo y quien va a decir quién miente y quién no, soy yo’, me parece absolutamente fuera de lugar, fuera de todos los estándares democráticos y los estándares de gobierno de una institución como lo es la Presidencia de la República”, añadió.

La titular de la nueva sección García Vilchis, afirmó que el propósito es contrarrestar las fake news, ante el “uso doloso y negligente de la información “y que será una “plaza pública en la que se discutirá libremente sobre lo que los medios de publican”.

También recalcó que de ninguna manera será un ejercicio de censura o persecución a medios y periodistas.

CR

Share.
Exit mobile version