La Gimnasta uzbeca ha participado en ocho Olimpiadas, lo que la convierten en la atleta con más participaciones

© Getty Images. 

La gimnasta uzbeca, Oksana Chusovitina se despidió de Tokio 2020 tras acumular un total de 14,166 después de dos intentos en la prueba de salto, su especialidad en la disciplina, y al no tener el puntaje necesario para pasar a la final, su trayecto olímpico llega a su fin.

La atleta se convirtió en la gimnasta en competir en más juegos Olímpicos en la historia, con un total de ocho participaciones, lo que significa que ha competido en todas las Olimpiadas desde su 1992.

Hizo su debut en Barcelona 1992 con tan solo 17 años de edad, donde ganó la medalla de oro en la modalidad de equipos; después estuvo presente en Atlanta 1996, Sídney 2000, Atenas 2004, Beijing 2008, donde consiguió la medalla de plata en salto; Londres 2012, Río 2016 y finalmente en Tokio 2020.

Los espectadores, las demás competidoras, jueces, técnicos y entrenadores que estaban presenciando un momento histórico en el olimpismo, despidieron a una leyenda de la gimnasia con aplausos y ovaciones de pie.

La medallista olímpica y campeona del mundo también tiene otro record muy particular: es la única atleta que ha jugado bajo la bandera de cuatro naciones.

© Getty Images. 

Nacida en 1975 en Bujurá, compitió para la Unión Soviética, tras su desaparición participó en los Juegos de Barcelona con el Equipo Unificado. Después lo hizo con Uzbekistán durante tres juegos, cambio a Alemania en Beijín y Londres, y regresó como uzbeka para Río y Tokio.

Tras la caída de la Unión Soviética, y por razones familiares, Chusovitina cambió de nacionalidad y en 1999, tras el nacimiento de su hijo que después fue diagnosticado con leucemia, ella y su esposo, el luchador olímpico Bajodir Kurbanov, se instalaron en Alemania para que si hijo recibiera tratamiento médico.

Oksana, había decidido retirarse de la gimnasia después de haber dado a luz, pero decidió regresar para poder tener un ingreso y pagar las cuentas familiares. Para Londres 2012, ya había anunciado que serían sus últimos Juegos, sin embargo, quiso regresar una vez más para poder representar a su nación de origen, y para Río 2016, la Federación Internacional de Gimnasia, le concedió nuevamente su cambio de nacionalidad.

Te recomendamos: SpaceX, de Elon Musk, obtiene un contrato de 178 millones con la NASA para la misión a la luna de Júpiter

SUS ÚLITMOS JUEGOS

Chusovitina ganó su plaza para los Juegos de Tokio 2020 en el Mundial de 2019 en Stuttgart, Alemania. Y aunque ya solo competiría en la modalidad de salto, declaró a la prensa en ese momento que seguiría preparando el salto más difícil, logrado exitosamente únicamente por tres gimnastas en la historia: el produnova.

La once veces medallista mundial se preparó con la ayuda de otra leyenda de la gimnasia, la bielorrusa Svetlana Boginskaya, su ex compañera de equipos en Barcelona 92, dónde compartieron el oro en la modalidad de equipos bajo el cobijo del Equipo Unificado.

Su segundo y último salto olímpico tuvo una dificultad de 5.200, los jueces le otorgaron un valor de 13,833 y al no ser suficiente para a ronda final, la leyenda uzbeca se despidió con lágrimas y dibujando un corazón con las manos.

Quizás ya no volvamos a ver competir a la gimnasta uzbeca, una de las pocas mujeres gimnastas que han regresado al deporte olímpico después de la maternidad, una sobrevivientes a la caída del socialismo soviético, la única que ha visto la evolución de la justa olímpica por tanto tiempo, pero existe una oportunidad de que su rostro ahora pase al lado de los organizadores, ya que la leyenda buscará ser miembro del Comité Olímpico Internacional (COI), plaza que será votada por sus compañeros en la Villa durante la justa olímpica.

CA.

Share.
Exit mobile version