En un inesperado giro de humor, Mike Myers realizó una parodia de reunión con Kanye West durante el sketch de la temporada final de Saturday Night Live el pasado 17 de mayo. Myers, quien se encontraba en un ascensor junto a la anfitriona Scarlett Johansson, se vio sorprendido al ser acompañado por el controvertido rapero interpretado por Kenan Thompson, lo que provocó que Johansson abandonara rápidamente el ascensor, dejando a Myers solo con West.
Un encuentro lleno de controversias
Durante el sketch, Kanye West comenzó la conversación quejándose de que su canción había sido eliminada de Spotify, a lo que argumentó: “¿Cuál es una buena razón?”. Este comentario hacía eco de la reciente controversia por la eliminación de su álbum ‘Donda 2’ de las plataformas de streaming poco después de su lanzamiento en abril. A medida que la conversación avanzaba, West hizo referencia a sus declaraciones pasadas sobre su infancia, sugiriendo que todos tienen un primo con quien compartir anécdotas peculiares.
Recuerdos del pasado
West, en un tono provocador, preguntó a Myers sobre su bienestar desde su último encuentro, que tuvo lugar durante el famoso concierto benéfico por el huracán Katrina, donde West hizo su polémica afirmación sobre George Bush. Esta mención trajo a la memoria un momento que fue considerado uno de los más controvertidos de la presidencia de Bush. Myers, nervioso, respondió a la pregunta de West sobre sus hijos, asegurando que estaban a salvo, en medio de un ambiente tenso y humorístico.
Un final inesperado
El sketch culminó con una nota cómica cuando West mencionó que estaba trabajando en una nueva canción titulada ‘Squeezin’ On My Grandpa’s Booty’. La situación se tornó aún más absurda cuando el ascensor se detuvo, generando un momento de pánico claustrofóbico para West, quien bromeó diciendo: “Soy un par de fobias yo mismo”. Este encuentro ficticio no solo entretuvo, sino que también recordó a los espectadores la complejidad de la figura de Kanye West en la cultura pop actual.
