Taylor Swift ha recuperado los derechos de las grabaciones maestras de sus primeros seis álbumes, marcando un hito en su carrera musical. En una emotiva carta dirigida a sus fans, publicada el 30 de mayo, la artista expresó su alegría por tener finalmente el control total de su catálogo musical. “Casi dejé de pensar que esto podría suceder, después de 20 años de tener la zanahoria colgando y luego siendo retirada”, escribió Swift, subrayando que toda su música ahora le pertenece.
La lucha por sus derechos musicales
Swift perdió los derechos de sus grabaciones en 2019 cuando el manager Scooter Braun adquirió su antiguo sello discográfico, Big Machine Label Group. Este acontecimiento generó una gran controversia, ya que la cantante calificó la situación como “el peor de los escenarios” y denunció el “acoso manipulador” de Braun. Para recuperar el control de su música, Swift decidió regrabar sus primeros seis álbumes, lanzando versiones bajo el título ‘Taylor’s Version’.
Un nuevo capítulo con Shamrock Holdings
La historia dio un giro en 2020 cuando Braun vendió los derechos de las grabaciones a la firma de capital privado Shamrock Holdings en un acuerdo de 300 millones de dólares. Swift, en ese momento, afirmó que las grabaciones “no estaban a la venta para ella”. Sin embargo, en su reciente anuncio, reveló que ha comprado sus masters, así como videos, películas de conciertos, arte de álbumes y canciones no publicadas, agradeciendo a Shamrock por su trato justo y respetuoso.
Impacto en la industria musical
Swift ha utilizado su experiencia para abrir un diálogo sobre los derechos de los artistas respecto a sus masters. Su lucha ha inspirado a nuevos artistas a negociar la propiedad de sus grabaciones en sus contratos discográficos. “Cada vez que un nuevo artista me dice que ha negociado para poseer sus grabaciones maestras gracias a esta lucha, me recuerda lo importante que fue todo esto”, concluyó Swift, resaltando la relevancia de la discusión sobre los derechos en la industria musical.