Claudia Sheinbaum y la marcha de la Generación Z: un análisis crítico
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, se pronunció sobre la marcha de la Generación Z, programada para este sábado, señalando que el movimiento está siendo impulsado por personajes de la derecha. En su conferencia matutina, Sheinbaum afirmó que la convocatoria, que se presenta como un fenómeno orgánico en redes sociales, es en realidad un esfuerzo orquestado con un costo estimado de 90 millones de pesos. Esta afirmación ha generado controversia y ha puesto en el centro del debate la autenticidad de las motivaciones detrás de la manifestación.
La percepción de la Generación Z hacia el gobierno
Según un análisis realizado por el director de Encuestas de El Financiero, Alejandro Moreno, la popularidad de Sheinbaum entre los jóvenes de la Generación Z es notablemente inferior a la de otros grupos. La aprobación de su gestión se sitúa en un 66%, lo que contrasta con el 73% de aprobación entre los millennials. Además, el 69% de los jóvenes de esta generación reprueba la actuación del gobierno en temas de seguridad, lo que refleja un descontento significativo con las políticas actuales.
La respuesta de Sheinbaum ante la marcha
Sheinbaum enfatizó que el gobierno no se opone a las manifestaciones, pero cuestionó la participación de figuras políticas mayores en lo que considera un movimiento juvenil. “Los jóvenes tienen derecho a manifestarse, pero esta marcha se ha convertido en una manifestación de la oposición”, declaró. Su comentario resuena en un contexto donde los jóvenes de la Generación Z, aunque menos interesados en la política tradicional, están comenzando a expresar sus opiniones y preocupaciones de manera más activa.
¿Qué futuro para la relación entre la Generación Z y el gobierno?
A pesar de su menor interés en la política, la Generación Z está cada vez más conectada y exige respuestas a los problemas que les afectan. La presidenta Sheinbaum enfrenta un desafío considerable para reconectar con este grupo, que valora la diversidad, la autonomía y la crítica constructiva. A medida que se acerca la marcha, se espera que la dinámica entre el gobierno y esta generación evolucione, reflejando las tensiones y expectativas de una juventud que busca ser escuchada en el panorama político de México.

